Space jam
Unos alienígenas malvados quieren secuestrar a los Looney Tunes para llevarlos con ellos a trabajar a su parque de atracciones. Cómo son diminutos, Bugs Bunny les reta a un partido de baloncesto, pero los alienígenas poseen las habilidades y el tamaño de estrellas de la NBA, y los Looney Tunes necesitarán la ayuda de Michael Jordan para ganar.
La película fue dirigida por Joe Pytka también conocido en su faceta de creador de videoclips para famosos cantantes com Los Beatles o Michael Jackson. La producción de la película la protagonizó Ivan Reitman.
En la película intervienen unos cuatro guionistas, la pareja Leo Benvenuti y Steve Rudnick, y Timothy Harris y Herschel Weingrod, autores del libreto de clásicos como 'Los gemelos golpean dos veces'.
El reparto está formado por estrellas de la NBA de aquel entonces como Charles Barkley, Larry Bird, Patrick Ewing o Del Harris, interpretándose a sí mismos, en versión deliberadamente mema, debido a que los alienígenas les robaron sus habilidades. En papeles ficticios, están Theresa Randle, como la mujer de Michael Jordan, o Wayne Knight, como el agente del jugador de la NBA Michael Jordan.Otro de los actores es Bill Murray el cual hace una versión de sí mismo que sueña con triunfar en la NBA. Danny DeVito es quien presta voz a los alienígenas juntos a Billy West como Bunny o Dee Bradley Baker como el pato Lucas o el diablo de Tasmania.
La película es predecible, pero los grandes toques de humor provienen, en mi opinión, por la clásica dinámica entre Bugs Bunny y el pato Lucas , ya que resulta imposible que los carismáticos Looney Tunes puedan arruinar una aparición tan brillante en la película. El pato Lucas recuerda que no cobran por la película y que son propiedad de Warner Bros en una escena de la película, y el Bugs Bunny parece muy cómodo compartiendo escena con un Michael Jordan consciente de su papel como leyenda viviente que es, y de hecho la historia de Jordan es una versión de su retorno al baloncesto tras haber estado jugando al béisbol, que ocurrió unos años antes del estreno de esta película.
Es cierto que, con el tremendo juego que dan los dibujos animados a la hora del desarrollo de la película, un partido de baloncesto no es la mejor manera de sacar todo el partido a una película de este calibre, pero Pytka, el equipo de efectos visuales y el excelente Michael Chapman mantienen la película, calidad técnica impresionante y una coherencia visual destacable en una superproducción de estas características.